¡Carajo! Como ha
cambiado este pueblo!
Llevo más de
dieciséis años (16) viviendo en este hermoso pueblo, y a pesar de que aún
conserva muchas de sus tradiciones y costumbres (Semana cultural, Ferias, Los
carnavales, Semana santa, Festival vallenato, etc.)
Veo con mucho asombro
como mi pueblo ha ido cambiando y se ha desarrollado grandemente en la parte
comercial e industrial tanto en la zona urbana como en la zona rural.
Como soy una persona
curiosa quise investigar e indagar para conocer acerca de cómo se han ido dando
estos cambios.
Empecé por
preguntarles a mis abuelos. Me contaron que las tierras
se medían de una forma rustica; contando los pasos al ojo con cabuyas, basados
en los conocimientos que sus años de experiencia les daban, ponían en práctica
la sabiduría indígena y se sentían orgullosos de poner en práctica ese dicho
que dice “ Mas sabe el diablo por viejo que por diablo”
También me contaron
que ellos, sembraban la tierra manualmente, araron con azadones, con bueyes.
Las semillas que cultivaban eran las que ellos recogían de los cultivos, los
ponían a secar y los guardaban para la próxima cosecha. Antes no existían los
tales agrónomos, que criaban sus gallinas con puro maíz, los cerdos con suero
dulce y desperdicio y el ganado crecía comiendo caña, hierba y sal, dando la
leche más sabrosa y espumosa. Ahora ven como las semillas hasta contadas, los
tales agrónomos las traen de laboratorios; hacen las semillas injertadas que
crecen en menos tiempo y en más cantidad. El terreno lo aran con tractores, y
hasta recogen las cosechas con grandes maquinas.
Ahora crían el pollo
a fuerza de una vaina que llaman purina, y se la dan en porciones medidas, con
vacunas. Según es su crecimiento y mira que en menos de cuarenta y cinco días
esos pollos están grandotes y pesan más de cinco libras.
Después de haber
escuchado los relatos de mi abuelo, he podido entender que gracias a los
grandes adelantos científicos que se han aplicado en la parte rural acá a
nosotros en el pueblo nos llega muchas más variedad y cantidad de productos
tanto animales como vegetales; lo que ha hecho que grandes empresas hayan puesto sus ojos en este pueblo,
trayéndonos gran variedad a menos precios. Favoreciéndonos en la parte
económica y generando mucho más empleo y progreso a mi pueblo.
Hoy mi abuelo mi
abuelo ha venido a visitarnos, después de tantos años, yo lo llevo de la mano a
dar una vuelta por el centro y mientras caminamos le trato hacer entender como
sus métodos antiguos han sido desplazados y reemplazados por la tecnología
trayendo consigo el mejoramiento de los productos que hasta incluso enviamos
para otros países.
El me miro a los ojos
y me sonrió y con esa sabiduría que los años dan me dijo.
“Mucho químico es
malo, mira que antes las gallinas y los huevos criollos saben muy diferente a
los de ahora; Mira como las personas se enferman de tantas enfermedades que antes ni se conocían; yo sigo pensando que
todo lo de antes era mucho mejor.”
Seguimos caminando
pasamos por el parque central, él lo observó; lo lleve a la olímpica, compramos
algunas cosas y de inmediato volvió a comparar los tiempos cuando él iba de
compras pero a la plaza de mercado donde la gente vendedora si no estaba
pendiente de lo que vendía les robaban. Cuando salimos miró hacia el cielo con
una expresión en su rostro y dijo:
“Carajo como ha
cambiado mi pueblo”